viernes, 20 de noviembre de 2009

martes, 25 de agosto de 2009

Proximo encuentro... 12 de Septiembre

Tema: El Miedo: ¿Una emoción que
protege o paraliza?
Un encuentro para explorar mis
miedos y descubrir mi fuerza
Horario: 15 hs
Lugar: a confirmar
Destinado a toda persona que viene del interior o del exterior del país
Inscripción previa

sábado, 22 de agosto de 2009

ONE LOVE

http://http://www.youtube.com/watch?v=4xjPODksI08
"Playing For Change", es un movimiento por la paz a través de la musica.
Queremos compartir este hermoso video que coincide con nuestro objetivo...
el buscar integrar las diferencias culturales, la busqueda de la unidad.
one love

lunes, 10 de agosto de 2009

Fragmento de... "Buenos Aires y Yo" (de M.Inés Leiva)

"... Ríos interminables, de gente que iba y venía, a paso rápido, por veredas estrechas , acorralados por un laberinto hecho de altísimas moles de cemento...¡Sentía que me ahogaba! Gente que aparecía, como una invasión de hormigas, en todos lados, a toda hora, todos los días. ¿De dónde salían tantísimas personas? Tantas, y en todas partes, no dejaban de sorprenderme. Pero, cuando a la tardecita, me asomaba por mi pequeño balcón, buscando un poco de aire... lo comprendía todo. Allí, delante de mí, se elevaban cientos y cientos de edificios que bloqueaban la puesta de sol. Mi puesta de sol …que yo seguía imaginando sobre la cordillera de Los Andes, como acostumbraba ver desde mi ventana, desde mi patio, desde mi terraza...no hacía tanto tiempo atrás. Puesta de sol que no iba a ver allí. ¡Si ni el horizonte se veía! Sin embargo me quedaba un largo rato mirando…el nuevo paisaje…y observaba… edificios hasta donde se perdía mi vista…Y en cada uno de ellos, decenas de ventanas…en cada ventana, una, o dos personas…o una familia tipo…quien sabe…y seguía pensando , calculando…Me preguntaba, por cuadra, ¿cuántos edificios habría?¿diez? ¿quince? ¿veinte tal vez?...y entonces, ¿cuántos por manzana? ¿sesenta? ¿ochenta?...Y si cada uno de los edificios tenía un promedio de diez pisos…tres departamentos por piso…un promedio de dos o tres personas por departamento…daba un total de ¡noventa personas por edificio!...Y éstas, multiplicadas por los sesenta u ochenta edificios …serían unas…¡Basta! ¡Basta! ¡Qué horror! ¡No quería enterarme! Mientras sentía como se me oprimía el pecho, con los ojos llenos de lágrimas, elevaba la vista, estirando el cuello hacia arriba, en busca de un pedacito de cielo…que encontraba, chiquitito, recortado por ángulos rectos provenientes de las figuras ya ensombrecidas, de esos incontables muros que me rodeaban .Y en ese pedacito de cielo, descubría el tinte anaranjado…de la puesta de sol…que en algún lugar muy lejano…inaccesible para mí…. se estaba produciendo. En ese momento lo único que deseaba era salir corriendo...y escapar. Saltar del balcón y salir volando hacia el poniente. ¡Cuánto hubiese dado por saber volar! Buenos Aires me introducía en la experimentación de un sentimiento novedoso para mí, la nostalgia. La nostalgia es posesiva, envolvente, de sabor amargo…que despierta desesperados sueños por volver. Repentinamente escuché los ecos de la voz de mi abuela que me cantaba una de sus poesías favoritas… Lo hacía con tanta pasión…y ahora comprendía porqué… Esa última estrofa, ella la recitaba con el alma: “… Si a un pago muy lejos del tuyo, indiecito, algún día te llevan… y no eres feliz… y suspiras por volver a tu vieja querencia...y una tarde, en un soplo de viento, el sabor a tus montes te asalta… ya sabrás indiecito asombrado…lo que es, la palabra, nostalgia.” Me dí cuenta que amaba esa poesía. Me gustaba porque estaba asociada a mi abuela, pero también porque ahora la estaba palpitando. En carne propia. Juana de Ibarbourou, esa poetiza uruguaya, hablaba por mí. ¡El sabor a mis montes me acababa de asaltar a través de ese pedacito de cielo naranja! Me quedé sollozando en silencio hasta que cayó la noche. Las luces de la ciudad se fueron encendiendo poco a poco…y permanecí allí hasta que empecé a sentir que me iba transformando en una espectadora involuntaria de la vida de los vecinos. ¡Qué espanto! Enfurecida pensaba: ¡¿Pero es que estos porteños no tienen ningún prurito en ventilar su intimidad?¡No solo la gritan a los cuatro vientos cuando van por la calle, en el subte, en el tren…sino que también me la muestran de prepo! ¡¿Pero porqué diablos no corren las cortinas?! ¡ Lo podía ver todo! El pelado del tercer piso del edificio ubicado justo en frente del mío, se acababa de sentar en su sillón verde a ver tele…La niñita de trenzas del quinto hacía los deberes mientras su madre ordenaba la biblioteca….y así podía continuar relatando historias en vivo y en directo…¡¿Qué hacía yo ahí?! ¡¿Qué hacía en esta ciudad de locos??!..El espectáculo nocturno me hizo sentir vergüenza ajena, y abandoné el balcón, muy incómoda…llena de bronca y angustia.
Con el correr de los meses, fui aceptando los caprichos, incorporando las mañas y descubriendo los muchos encantos de Buenos Aires. La gran ciudad terminó por cautivarme y yo por adoptarla. Sin embargo, aún hoy, me inquieta la ausencia diaria de mi ansiada visión del cielo...ese con sus nubes y sus estrellas. Cielo extenso ,naranja u ocre , azul o celeste , rojo o púrpura...que quedó atrapado en Mendoza y en mis recuerdos... "

martes, 28 de julio de 2009

Próximo taller sábado 22 de Agosto


" Des- cubriendo quien era y quien soy "
Un encuentro para explorar y ampliar
los distintos aspectos de mí identidad
Horario: 15 hs.
Lugar: Gurruchaga 1168 (AGBA)
Tel.: 155 469 8893/ 155 957 3236
Inscripción previa. Cupos limitados.

sábado, 6 de junio de 2009

Compartiendo...

"Tomar coraje y empezar de nuevo
y no tanto
Caminar otras veredas, respirar otros aires...
Nuevos Aires
Soltar lo conocido y nadar
en el anonimato de una gran ciudad

¿que hago? ¿como sigo? ¿como empiezo?
¿me acerco? ¿no me acerco?
llorar la ausencia
del olor conocido y amoroso

Salgo, me aventuro y descubro
abrazos mas nuevos,
naciendo entre las hojas
caídas de este otoño..."
Adriana Mendes Rosa

miércoles, 3 de junio de 2009

viernes, 29 de mayo de 2009

Les recomendamos la música de Tanghetto, el CD “Emigrante”

“Este disco esta inspirado en las personas que por motivos sociales, políticos, económicos, o afectivos, han tenido que abandonar su suelo. Es un homenaje a la cultura del DESARRAIGO y a todas aquellas personas que sin ser de aquí o de allá aman lo bueno de cada pueblo y luchan para destruir injusticias o prejuicios donde quieran que estén”

Que lo disfruten!!

jueves, 28 de mayo de 2009

Migrar: un maravilloso duelo inevitable

“Aquí la tierra late distinto” ([1])
La persona que decide irse a vivir a un nuevo lugar atraviesa una situación de cambio llamado “duelo migratorio”, que no solo da lugar a ganancias y beneficios sino que también comporta una serie de tensiones y pérdidas.
Un duelo por lo que se deja atrás: la cotidianidad con la familia, los amigos, las distancias, la naturaleza, el club, el vecino, etc. Todo lo que rodea a la persona que migra es nuevo.
Por duelo se entiende el proceso de pérdida de una persona, objeto, evento o lugar significativo. Es un proceso psicológico que comprende cambios en el estado de ánimo y también en los niveles fisiológicos y sociales. La intensidad y duración de este proceso será proporcional al significado de la pérdida.
A diferencia de otros duelos, el migratorio se caracteriza por ser un duelo parcial (pérdida ambigua), donde existe la posibilidad de estar en permanente contacto con el objeto perdido (lugar, cultura, amigos, familia), por lo tanto es más una separación que una pérdida definitiva. Al mismo tiempo es un duelo recurrente, está reabriéndose constantemente por medio del contacto telefónico, Internet, viajes, visitas. Y es múltiple, porque se pierden muchas cosas valiosas. Al ser un duelo múltiple y ambivalente, la persona péndula entre dos tiempos, entre dos lugares, entre lo definitivo y lo transitorio, entre el fracaso y el éxito. Esta situación afecta la definición de identidad, es más difícil saber quién se es y de dónde. (Rozo Castillo, J. 2007)
Borja (1995) sostiene que el sufrimiento es un contenido enfermo, donde uno se aferra a vivir mal, se vuelve adicto a ese malestar. El sufrimiento es irracional y lleva a la parálisis o a la hiperactividad; es una capa externa que evita contactarse con el dolor. Por el contrario, el dolor, es estar en contacto con lo que sentimos, con nuestras carencias, con lo más profundo, con la esencia. Lo difícil es ir del sufrimiento al dolor. El dolor no tiene comprensión, es un espacio silencioso que implica aceptación.
Atravesar pérdidas sin la posibilidad de expresar lo que uno siente, sin ser conciente del dolor, afecta la salud física y mental. Algunas consecuencias psicosomáticas pueden ser: ulceras, migrañas, contracturas, cistitis, caída de pelo, dolores gástricos u otras enfermedades.
Las emociones pueden aparecer desplazadas si en una familia se acostumbra a expresar más el enojo que la tristeza, es probable que quien se vaya se enoje fácilmente con pequeñas cosas. Se desplaza la emoción y también el objeto que despierta dicho sentimiento, se vuelve más tolerable pero al mismo tiempo hace más difícil la elaboración del duelo porque lo auténtico no tiene la posibilidad de expresarse.
Una chica en su primer año de migración comentó “Yo no puedo estar mal, mis padres hacen mucho esfuerzo para que este acá y además no quiero que sufran por mi”. Estas creencias son trabas en la elaboración del duelo que le impiden contactarse con sus sentimientos.
Cómo la persona atraviese el duelo, va a depender de cómo ha vivenciado los primeros duelos de su existencia, y también de cómo históricamente se han elaborados los duelos en su familia.
Achotegui, (2002), plantea que los duelos pueden ser “simples”; a pesar de que la persona sufre por la pérdida de afecto y apoyo (directo) de los seres queridos y la presencia de sentimientos de soledad, ansiedad y miedo ante el futuro. La migración se realiza en buenas condiciones si se encuentra en un entorno que la recibe, tiene un proyecto, una vivienda, cuenta con el apoyo familiar, seguridad económica, una red social.
Existe otra categoría, los “duelos complicados”, donde el entramado de situaciones sociales y personales dificulta la elaboración de las pérdidas. Pudiendo afectar la salud mental y desarrollar el llamado “Síndrome del inmigrante con estrés crónico y múltiple” o “Síndrome de Ulises”, que hace mención al héroe griego que padeció innumerables adversidades y peligros lejos de sus seres queridos. Este síndrome se presenta cuando los niveles de estrés son tan intensos que llegan a superar la capacidad de adaptación, está relacionado con condiciones de vida muy empobrecidas. La persona se encuentra en una situación de estrés límite, con cuatro factores vinculantes: la soledad, un sentimiento interno de fracaso, miedo y sentimiento de lucha por sobrevivir, acompañado de una serie de síntomas psiquiátricos: depresión, ansiedad, somatización y confusión. La intensidad y duración de los síntomas darán la posibilidad de diferenciar un duelo normal de uno patológico, y realizar un diagnóstico diferencial con otras patologías.
En la Terapia Gestáltica, se habla del “contacto” como la oportunidad de encontrarse con el medio que lo rodea y obtener algo nutricio. Polster (1997) define el contacto como la conciencia de aquella novedad que es asimilable y la conducta correspondiente a ello y aquello que es inasimilable, y su consecuente rechazo. Es la función que sintetiza la necesidad de unión y separación entre el adentro y el afuera.
Es el contacto lo que permite que se de el crecimiento, el cambio de uno mismo y el cambio de la manera de ver el mundo. Aceptar o rechazar la novedad produce un cambio en sí mismo, el contacto es incompatible con la idea de que se sigue siempre igual.
Cada uno va construyendo las fronteras del yo, por medio de la familia, la cultura, el conjunto de experiencias personales y la aptitud que haya adquirido para asimilar experiencias nuevas o intensificadas. Estas fronteras determinan el tipo de contacto que es admisible; se va delimitando todo lo que es aceptable para mi yo de lo que no lo es, lo cuál incluye: ideas, actos, valores, imágenes, recuerdos, define actos, incluye los riesgos que uno está dispuesto a enfrentar, etc.
Dentro de la frontera del yo la relación con el otro puede darse con comodidad y soltura, pero es en el límite de la frontera donde se produce un contacto más riesgoso y la posibilidad de gratificación menos cierta, uno se arriesga a encontrarse con lo desconocido. Si la experiencia excede los límites de tolerancia, la persona interrumpe el contacto o lo disminuye por medio de las resistencias. La disminución de la capacidad de contacto es lo que ata al hombre al aislamiento.
Cuando el contexto en el que se vive cambia, generalmente aparece una constante fuerza que empuja hacia lo nuevo y traspasar las fronteras del yo. Y otra contraria que resiste empujando a quedarse dentro de ellas, en el espacio seguro y conocido. Hay cierta resistencia a encontrarse con el vacío.
Este interjuego de fuerzas lleva a la necesidad de una reorganización de la personalidad. Existe una pérdida de la seguridad básica, las personas cambian, por ende el modo de interacción conocido se vuelve frágil. Es muy común, que en los primeros años las personas se agrupen con los del mismo lugar de origen y que frecuenten espacios donde se comparten los mismos códigos y valores. Establecer estos vínculos conocidos es importante en un primer momento, como un modo de preservar la propia identidad. En algunos casos, dan la confianza necesaria para luego animarse a experimentar nuevas relaciones. Pero en muchos otros casos, a pesar de estar viviendo hace años en Capital Federal por ejemplo, las personas se quedan dentro de lo conocido. Se observa una imposibilidad de hacer nuevas relaciones con la gente del lugar o experimentar nuevas vivencias.

El duelo es un proceso normal, dinámico y activo, y no un estado. “El trabajo del duelo permite enfrentar la realidad y vincularse con nuevas esperanzas, tener nuevos proyectos, hacer nuevas relaciones, rehacer la vida, finalmente “dar vuelta la página” y aprender a vivir de una manera diferente”. (A. Schützenberger, E. B. Jeufroy. 2008)
La experiencia de migrar es profundamente movilizante y el duelo del lugar de origen puede llevar un largo tiempo, puede ser un proceso simple o complejo. Este trabajo es inconsciente y por lo tanto no voluntario, sin embargo un trabajo conciente es posible.
Si el proceso de elaboración de un duelo es ignorado, retrasado o demorado, empiezan a aparecer las complicaciones. En la medida que se pueda hablar sobre las vivencias y sentimientos, el camino de elaboración se acorta. Es en el límite de la frontera de contacto donde se da la experiencia, el encuentro entre el individuo y su entorno, donde se produce el cambio, donde se acepta lo asimilable y se rechaza aquello que no sirve.
Acompañados por otros, y por un grupo, como lo vengo observando en los talleres gestálticos donde trabajo las vicisitudes del desarraigo, el tránsito para la persona se vuelve más llevadero, saliendo fortalecido y enriquecido de esta situación. Y donde compruebo el poder transformador que se encuentra en el compartir del "dolor común”.
Migrar es atravesar una crisis y en toda crisis subyace una oportunidad. Una oportunidad de arraigarse al nuevo lugar y con la posibilidad de tomar lo nutricio de esta nueva tierra.

Luciana Videla

Bibliografía

Achotegui, J. 2000. Los duelos de la migración. En Medicina y cultura. En Medicina y cultura. E. Perdiguero y JM Comelles (comp). E. Perdiguero y JM Comelles (comp). Pag 88-100. Editorial Bellaterra.Editorial Bellaterra. Barcelona Barcelona
Achotegui, J. 2003 (compilador). Dossier de la reunión internacional sobre el Síndrome de Ulises celebrada en Bruselas en la sede del Parlamento Europeo el 5 de Noviembre del 2003.
Achotegui, J. Emigrar en situación extrema: el Síndrome del inmigrante con estrés crónico y múltiple (Síndrome de Ulises).
Borja, G. 1995. La locura lo cura. Ed. La llave. Vitoria, España.
González Calvo, Valentín. Revista Trabajo Social, N° 7. http://www.revistas.unal.edu.co/index.php/tsocila/article/view/8477 . El duelo migratorio.
Polster E. y Miriam. 1997. Terapia Guestáltica. Perfiles de teoría y práctica. Ed. Amorrortu. Buenos Aires
Rozo Castillo, Jairo. 2007. Efectos del duelo migratorio y variables socioculturales en la salud de los inmigrantes. En: Revista Eclecta, Vol. V, No. 12, diciembre de 2007.
Schützenberger, A y Jeufroy, E. B. 2008. Salir del duelo. Superar el dolor y reaprender a vivir. Ed. Taurus. Buenos Aires
Sappir, Gasir. Centro de Migración y Salud Mental. http://www.fhspereclaver.org/migra-salut-mental/index_es.htm. Estrés límite y salud mental: el Síndrome del inmigrante con estrés crónico y múltiple (Síndrome de Ulises)

[1] Frase expresada por una participante de los talleres gestálticos para migrantes, oriunda de Comodoro Rivadavia.

miércoles, 22 de abril de 2009

Próximo Encuentro- Mes de Mayo

Sábado 16 de Mayo, 15 hs
"Transitando el desarraigo... ¿cómo me vinculo?"

Lugar: Asociación Gestáltica de Buenos Aires (AGBA)
Gurruchaga 1168
Inscripción previa, cupos limitados

Condiciones para participar

Marcá las frases con que te sientas identificado en el presente o en el pasado:

- si subís a un colectivo y saludas al chofer
- si te presentas con los vecinos del piso
- si vas a una plaza a tomar mate, buscando verde
- si tenes platos de cada pueblo un paisano
- si tenes una caja como mesa de luz
- si tenes muebles de pino o de fórmica
- si sentís vergüenza ajena cuando otro cuenta su vida por celular
- si invitas a tu casa a alguien que recién conociste
- si cuando te encontras a un amigo de allá preguntas: “¿qué haces… te quedas acá o te volves?
- Si querés mantener tu tonada
- Si saludas aca en Buenos Aires como de toda la vida a aquel que le corrías la cara en tu lugar de origen
- Si vas a peñas
- Si sentís que no sos de acá ni sos de allá
- Si te sentís un alfiler en medio de un pajar
- Si no entendes los tiempos que lleva llegar a un lugar
- Si te subiste al colectivo y….era el que iba para el otro lado
- Si la chica que te ayuda a limpiar tu casa…se la recomendaste a todos tus amigos de ciudad de origen…porque es buena y conocida
- Si te juntas a matear….laaargoo tiempo
- Si vas al boliche donde sabés que te encontrás con los de tu pueblo o ciudad
- Si no podés creer el viajar todo apretujado…y dejas pasar el subte o el cole….por si el otro viene más vacio…


Si has marcado mas de tres… Felicitaciones!!! Estas en condiciones de venir a estos talleres. Si marcaste todas…. Te esperamos en todos los encuentros del año!!!!!

¿Qué es un taller?

Es un encuentro grupal, donde se propone trabajar sobre un tema y una experiencia vivencial para poder ampliar la mirada de mi mismo.

¿Qué es la Gestalt?

Es una teoría existencial que apunta al presente, a la integración de la persona y a un crecimiento personal.

martes, 24 de marzo de 2009

domingo, 22 de marzo de 2009

Difusión

Artículos Publicados

Entrevista Radial

  • 07/01/2009. Fm 92.1. Integración Rionegrina. Programa "Matices". Viedma, Río Negro